A veces me gusta sustituir los lienzos grandes por pequeños apuntes como este, es una buena manera de ejercitar pinceladas sin dedicar mucho tiempo ni pintura y quedan perfectos con un pequeño marco de cristal.
Hoy es viernes así que voy a dejar que estos niños sigan ensimismados en su mundo mientras yo me doy un chapuzón en la piscina y empiezo a disfrutar el finde.
Y después de unas vacaciones ¿qué mejor plan que seguir pintando? un cambio de aires siempre viene bien para coger fuerzas y dar frescura a cada pincelada. He vuelto al ataque con ganas de seguir pintando en esta linea. Cada día me descubro a mi misma disfrutando más la interpretación y captando la esencia.